En Mujer Balance no podemos dejar de hablar del Yoga. Y es que es una herramienta de gran valor en nuestra aventura de conquistar el balance. La palabra Yoga viene del sánscrito Ioga y significa «unión»…
Unión entre todos los aspectos de nuestro ser; nuestras emociones, nuestros pensamientos, nuestro cuerpo físico, nuestro cuerpo espiritual:. El Yoga es una ciencia y una filosofía de vida que tiene más de 2.000 años y se centra en conseguir la armonía propia. Viene de la India, razón por la que nos puede parecer extraña, así que descartar esta impresión, ya sabemos que es producto del condicionamiento que nuestra cultura ejerce. Consideramos que explorar algo como esto solo puede enriquecernos, así que vamos a ir probando posturas sencillas que podamos hacer en casa.
El Yoga es una práctica que requiere de un maestro, requiere supervisión y guía constante, sin embargo compartiremos algunas posturas que considero están a prueba de principiantes, recordándoles en todo momento que sin la respiración, no sirve. Cada movimiento va siempre impulsado por la respiración. Poco a poco lo vamos a ir interiorizando hasta notar como nuestra energía cambia:. Esta transformación es hermosa de apreciar a través del tiempo. 🙂
Cada mes compartiremos una postura para practicar en casa. Con la idea de sacar tiempo para respirar, para escucharnos y para crecer por dentro. Recordando eso de que «la mujer que no tiene tiempo para sí misma, está perdiendo el tiempo»… y poniéndolo en práctica. Sentando las bases para ser fieles a lo que pensamos, de forma que nuestras acciones reflejen como nos sentimos y cómo pensamos. Teniendo en cuenta que el balance verdadero viene de adentro, y dispuestas a ensuciarnos las manos si hace falta para lograrlo. Porque cuando nuestras raíces están ancladas en lo profundo de la tierra, podemos ser refugio para nosotras y para muchos otros y porque si no nos queremos primero a nosotras, cómo podemos pensar que queremos a alguien más?
Vivimos tiempos de cambio, y vale más hacer frente y fluir. Aquí estamos para compartir las herramientas que nos van a ayudar a conseguirlo. Queremos ser un apoyo, una familia que crece unida y que comparte un legado:..
Con «Introducción al Yoga» pretendemos darte luz, que no es otra cosa que información…. para que puedas hacer el mejor uso de ella!:.. En esta primera entrega, traemos la postura que practican las heroínas para meditar.
Piensa que una vez que tu cuerpo esté en la posición correcta, se convierte en una especie de vasija capaz de alojar una determinada energía, una determinada vibración. Ésta vibración, cuando habita tu cuerpo es capaz de influir en tu propia vibración, elevándola!
Para ayudarte, ten a mano un medidor de tiempo, (timer) o una alarma que puedas programar. Sugiero probar con 3 minutos para empezar. La idea de la alarma es que te avise para que tu puedas realmente desconectar. Asegúrate de hacerlo en un momento en el que nadie te interrumpa. Este es un momento para tí:.
- Usa ropa cómoda
- Para llegar a la postura, comienza así:
- Siéntate con las piernas estiradas
- Dobla la pierna izquierda por debajo de la derecha, de forma que el isquión derecho (huesito de la nalga) repose sobre el talón izquierdo
- Cruza la pierna derecha sobre la pierna doblada de forma que el talón derecho toque la nalga izquierda.
- Ajusta la rodilla derecha para que esté sobre la rodilla izquierda.
- Coloca las manos sobre la rodilla derecha, o sobre cada pié, como te resulte más cómodo
- Cabeza, cuello y espalda penden de un hilo que tira de arriba, derechita.
- Cierra los ojos y concéntrate en la respiración: Inhala y exhala 10 veces o durante 3 minutos.
Esta asana o postura masajea y tonifica los órganos pélvicos y reproductores. Por lo tanto, trabaja con el 2do Chakra, el chakra de las relaciones. Este ejercicio regula tu respiración, proporcionándote calma. Es una buena postura para aprender a meditar:. Inténtalo!:. Cuenta tus respiraciones, que sean largas y profundas. La respiración debe ser abdominal – no pectoral.
If you are VERY into this;
puedes probar encendiendo una velita (para invitar al elemento «Fuego») antes de comenzar, acompañada de una varita de incienso (para invitar al elemento «Aire» y también para perfumar el ambiente, acariciar los sentidos). Queremos recrear un espacio sagrado, en donde podamos practicar siempre que queramos. Pensemos que esto ahora mismo no es un hábito, sino algo que estamos probando, y que si funciona, podemos convertir en un hábito que promete traernos beneficios, entonces vale la pena recrear un espacio apropiado. 😉
La Luna crece ahora mismo y no hay mejor momento para hacerlo!
Buena práctica chicas!:.. 🙂
Sarito